[draft] pie de post a ig 28enero2022
PRIMERA VERSIÓN. trescientos meses son suficientes árboles crecidos como pa taparle el paso a cualquiera que dude del bosque. si cuando llegamos, el bosque estaba, ahora podemos sentirlo con pisadas en experticia: crecimos en este, mi bosque y tu bosque, mientras este mismo se hacía con nosotrxs; ignorando senderos y probándolos después. pero eso ya es sabido. la cuestión ya no se trata de entender bien de dónde crece mi liana—la conocí a la fuerza tanteando su peligrosidad—ahora se trata de desobedecer los gritos desesperados de quienes pretenden zajar en ley límites de obligatoriedad a nuestra enorme voluntad.
he acompañado expediciones inexpertas, y me he tentado de adentrarnos de la mano hasta las zonas negras, donde nada-está-prohibido-pero-apenas-te-puedes-mover, pero los claros y los senderos encienden brillos en sus intenciones, con fuego llameante, en vorágine de aventura, y disuelvo mi absurdo egoísmo para disfrutar con los ojos de ellas del vértigo de esta nueva expedición. amo retransitar el bosque y podría bordearlo completo mientras
no fueron la compasión ni el deber las directrices de mi movimiento, sino mis completas ganas de invitar a
SEGUNDA VERSIÓN. trescientos meses son suficientes árboles crecidos como pa taparle el paso a cualquiera que dude del bosque. si cuando llegamos, el bosque estaba, ahora podemos sentirlo con pisadas en experticia: crecimos en este, mi bosque y tu bosque, mientras este mismo se hacía con nosotrxs; ignorando senderos y probándolos después. pero eso ya es sabido. la cuestión ya no se trata de entender bien de dónde crece mi liana—la conocí a la fuerza tanteando su peligrosidad—ahora se trata de desobedecer los gritos desesperados de quienes pretenden zajar en ley límites de obligatoriedad a nuestra enorme voluntad.
he acompañado expediciones inexpertas, y me he tentado de adentrarnos de la mano hasta las zonas negras, donde nada-está-prohibido-pero-apenas-te-puedes-mover, pero los claros y los senderos encienden brillos en sus intenciones, emociones incandescentes en vorágine de aventura, y disuelvo mi absurdo egoísmo explorador para disfrutar de estos mismos territorios apacibles, ahora con los ojos de ellas, con vértigo de nueva expedición. amo retransitar el bosque y que otra voz aprenda a moverse aquí dentro: si en mi deambular interno exploro la interioridad más densa solo caminando para llegar aún más allá, en mi deambular en tándem voy alerta, contento y en serio atendiendo al presente con olfato abierto a cada paso.
soy responsable de mi bosque y de quien se pierda caminándolo conmigo. si las muertes de lxs turistas me preocupan
TERCERA ALTERNATIVA. he acompañado expediciones inexpertas, y me he tentado de adentrarnos de la mano hasta las zonas negras, donde nada-está-prohibido-pero-apenas-te-puedes-mover. quién se atrevería, sin embargo, a proponer una absoluta peligrosidad.
los claros y los senderos encienden brillos en sus intenciones, veo emociones incandescentes en vorágine de aventura, y disuelvo, riendo de verdad y sin burla, mi egoísmo explorador; me transmuto sin esfuerzo hasta disfrutar de estos mismos, mis territorios familiares y apacibles, ahora con los ojos de ellas—con vértigo de nueva expedición.
amo retransitar el bosque y que otra voz aprenda a moverse aquí adentro: si en mi deambular interno exploro la interioridad más densa, caminando solo por llegar más allá, en mi deambular en tándem voy alerta, contento y tomándomelo en serio, atendiendo al presente con olfato abierto: sin guiños; sin metacomemtarios.
crecidas explorando el bosque, mis piernas expertas creyéronse normales, y juntxs, piernas, bosque y yo, demoramos trescientas muertes en aprender a calibrar. <<peligrosidad en perspectiva>>, pensamos con palabras, y creímos en nuestras palabras, representación de la Verdad. cuantificamos /peligrosidad/ y triagulamos la perspectiva, y supimos estar n más alerta para cada x compañera de expedición, según la relación dinámica entre las variables coyuntura, microhistoria, ontogenia, orden y clase.
fascinación, sin embargo, hubo una y hasta siempre. si a mi ternura hay quien describe como goce temporal, y si a mi ritmo hay quien le llama demasiado acelerado, fascinado y en éxtasis bosque profundo recorrido más adentro que lo denso corriendo atravesando matas de espinos mi bosque y el suyo tránsito de las únicas manos expertas expediciones sin miedo a la oscuridad ya sabía caminar y sabía de aventuras compañera firme última exploradora con la que pude avanzar en misiones de reconocimiento y no solo dedicarme a retransitar